Pues sí, hoy día 3 de diciembre se celebra la festividad de San Francisco Javier (si consigo terminar la entrada antes de la medianoche, claro) ¿Y por qué nos interesa ésto? Pues porque este santo fue el misionero que evangelizó Japón.
Vaya idol rara nos traes hoy, Sátur.
No es la primera vez que tenemos señores barbudos en la presentación, Yaguchi.
Francisco de Jaso y Azpilicueta nació en el Reino de Navarra en 1506, quinto hijo de una importante familia que durante su infancia y juventud se vio envuelta en la guerra entre los Reyes de Castilla y de Francia por la posesión del Reino. Finalmente, en 1530, el rey Carlos I de España consiguió la Alta Navarra (al sur de los Pirineos) y el de Francia la Baja Navarra (al norte). Los que se quedaron sin mucho fueron Francisco Javier y sus hermanos, ya que su padre murió en la guerra y sus posesiones fueron arrasadas.
Pese a todo, Francisco consigue ir a estudiar a la Sorbona parisiense en 1528 y allí recibiría la ayuda de Íñigo de Loyola (hoy más conocido como San Ignacio de Loyola) pese a que había luchado en el bando contrario a su familia durante la guerra. Finalmente se hicieron amigos y Francisco sería uno de los fundadores de la orden de los Jesuitas a las órdenes de San Ignacio (ayudándole también con sus famosos Ejercicios Espirituales).
En 1537 es ordenado sacerdote y, debido a la imposibilidad de viajar a Tierra Santa por la intransigencia turca, se pone a disposición del Papa. Habiendo recibido la petición del rey de Portugal para proporcionarle misioneros, el Papa envía entre otros a nuestro Francisco Javier como legado suyo para (si usamos nombres actuales) el Índico y Asia Oriental.
Francisco Javier zarpa de Lisboa en 1541 y durante los años siguientes predicaría en Mozambique, las Molucas, India, Indochina y un montón de sitios más que no voy a nombrar para no cansarles. Lo que nos interesa ahora es que llega a Japón en 1549 junto a dos compañeros misioneros y un japonés llamado Anjiro como traductor.
Estuvo predicando en esas islas hasta 1551 y luego prosiguió incansable su viaje hasta su muerte en la isla china de Sanchao el 3 de diciembre de 1552. Probablemente fue el mayor evangelizador (o al menos el más viajero) desde los tiempos de San Pablo.
No está mal para los que piensen que la vida de los misioneros es aburrida ¿verdad? Pero ¿hay alguna conexión con nuestras niñas?
Bueno, vamos a ver un pequeño esketch en el que Kaori está leyendo la fortuna (en forma de bola de cristal, ¿cristalomancia?) de Yuko cuando ve al diablo que está corrompiendo a las chicas de la ciudad para que sean malas. Parece que empieza a hacer efecto pero para salvarlas aparece Francisco ¿Makiel? Bueno, no cabe duda de a quién quieren representar y lo cambiarían para no molestar a los creyentes :-)
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