¿Brillarán todas las versiones?
Debemos recordar que el single estuvo 31 semanas en el Top 100 de la lista Oricon (ésto son casi 8 meses). De éstas, 3 semanas en el nº1 (14 semanas en el Top 10). Las ventas durante esas 31 semanas ascendieron a 1.646.630 copias. El single más vendido del grupo. Y no se cuenta en estos números las ventas posteriores, reediciones y demás.
En el álbum Cover Morning Musume hay una versión en inglés de Debbie French.
Al menos la versión no se limita a copiar el original y éso cuenta a su favor. En contra tenemos un sonido más estereotipado. Sin ser una mala canción, no destaca por nada y todo lo que alabamos de LOVE Machine en cuanto a la variedad dentro de la norma se diluye.
El cantautor estadounidense Scott Murphy tiene una serie de álbumes titulados Guilty Pleasures (Placeres Culpables) donde parece que se dedica a hacer versiones de canciones que le gustan sin importar mucho de dónde vienen. Al menos hizo el esfuerzo de cantar en japonés.
Cambia totalmente el estilo (imagino que pasa al estilo Scott Murphy) y el resultado no es totalmente de mi gusto. Al menos tenemos la versión hiper-rockera de la canción pero conservando algunas partes muy kawaii. (Una fórmula que con el tiempo llevaría al éxito a BabyMetal).
También hay versión coreana. El grupo After School hizo una versión titulada allí Dream Girls (Chicas Soñadas).
Desde luego son conscientes de que la canción era bien conocida en Corea y no intentaron hacer su versión ni nada. Tomaron el original, añadieron más sonidos electrónicos, algún rapeo y presentaron el LOVE Machine coreano. Sin embargo, las chicas son agradables de escuchar y tienen el encanto adecuado para el tipo de música que interpretan. No es nada extraordinario, pero sabían lo que querían hacer y lo hicieron muy bien.
Y otra versión en inglés, pero con estilo Reggae fue cantada por la británica Janet Kay con la particularidad de que el disco estaba producido por Tsunku y tuvo la participación de Ai Takahashi.
No soy muy entusiasta del reggae, pero la versión es bastante meritoria. Además, todos sabemos que por el simple hecho de tener a Ai Takahashi, cualquier cosa mejora automáticamente un 37%. Así que la contrataré para mis futuros proyectos.
Y, por último, ya sabemos que el número uno en Japón fue LOVE Machine, pero ¿y en España? Ay, qué diferencia en la cultura musical entre estos dos países. En España el número 1 el 9 del 9 de 1999 era Enrique Iglesias cantando Bailamos.
Mira que empezaba a escuchar las canciones un poco reacia, pensando que no me gustarían y mira por donde, sí que me han gustado, Love Machine es muy versátil, vale para cualquier estilo jaja
ResponderEliminarEs verdad que la versión de Debbie French es más normalita y no tiene nada que la haga especial, pero eso tampoco la hace una mala versión.
La versión de Scott Murphy, aunque me ha gustado, me ha dejado un poco desquiciada de los nervios jaja me gusta el rock, pero Love Machine originalmente ya tiene su ritmillo y si encima se le añade más fuerza a la canción, resulta mareante.
La versión de After School es con la que me encuentro más como "en casa", estoy acostumbrada a los ritmos coreanos, así que esta versión no me ha sorprendido, lo que no quita que me haya gustado. Aunque el rap sobraba, pero claro, si en una canción de pop coreano no hay rap, parece que no está acabada. Esto me recuerda a esas historias malas de amor en las que si no hay celos tontos, no están completas; vamos, un detalle innecesario que entorpece la historia, o como en este caso, la canción.
Y la versión de Janet Kay me ha sorprendido mucho, nunca me hubiese imaginado un Love Machine estilo reggae, pero me ha gustado mucho. A mí, al contrario que a ti, el reggae me llama más la atención, me gustan más las melodías más rápidas y esta resultaba un poco más lenta, pero aun así la he disfrutado.
Me encanta cuando haces entradas enseñando canciones no japonesas, siempre acabo descubriendo cosas buenas*-*
Ah y, ¿Bailamos contra Love Machine? Que lucha más desigual y con un claro vencedor :P
Un saludo^^
Yo recordaba las versiones ampliadas de T&C Bomber y tenía mucho miedito, pero la canción es tan buena que resiste el cambio y la adaptación, aunque no siempre conserva ese algo especial que la hizo un éxito originalmente.
EliminarDices bien lo de Debbie French, no es una mala versión y agradecemos que no sea una copia sin más, pero tampoco conserva esa variedad interna que señalamos como una de las cosas destacables.
De Scott Murphy, la verdad es que es más personal, e intenta cosas muy destacables, además se le nota, dentro de las ganas de darle su huella, el respeto por el original.
After School creo que tenía la tarea más difícil. Si en algún país fuera de Japón se conocía LOVE Machine, ese país era Corea. Pero sacaron una versión Kpop perfecta. La más parecida al original siendo la que tenía intención de distanciarse más.
Este reggae era bastante relajadito, sería Chill-Reggae ;) Sin embargo sacar el espíritu caribeño del JPop no es fácil y el resultado es bastante disfrutable.
Intentaré buscar más conexiones con canciones no japonesas, ya sabes lo que me gusta vagar un poco por los orígenes y siempre se puede uno encontrar alguna sorpresa.
Pienso que la parte buena de saber que Bailamos era número uno en ese momento en España es que si alguien critica LOVE Machine tenemos la respuesta inmediata y demoledora :D